jueves, 3 de marzo de 2011

La caravana de misión Caleb dejó huellas en Trujillo y Cajamarca

Entusiasmados por conocer a los Calebs que llamaron la atención de la prensa, del público y lograron ganar su alta estima, los líderes de los campos misioneros, los administradores de la Unión Peruana del Norte (UPN), Pr. Orlando Ramos, presidente y el Pr. Edward Heindiger, secretario; y el líder de jóvenes para la iglesia en Sudamérica, Pr.Arelí Barbosa; partieron de la “ciudad de la primavera” Trujillo, donde momentos previos formaron parte de la campaña de la campaña de donación de sangre denominada “Vida por Vidas“, rumbo a Cajamarca donde se llevaría a cabo la misma campaña.

La primera parada fue en la ciudad de Chocope, donde más de 100 calebs prestaron servicios a la comunidad, para esto el alcalde Carlos Alza, agradeció la visita del los líderes de la iglesia adventista y saludó a los jóvenes por su alto nivel en servicio. Continuando con el recorrido, llegaron a la localidad de San Pedro de Lloc, los jóvenes Caleb fueron ovacionados por el Pr. Arelí Barbosa, quien extendió el saludo del pastor Ertön Kholer, presidente de la División Sudamericana. La siguiente parada fue en la plaza central del mismo distrito, donde la delegación de administradores fue recibida, la plaza, adornada de monumentales “caballitos de mar” y le dio un toque diferente al recorrido.
Antes de finalizar la caravana, se hizo un alto en el pueblo de Chilete, donde se hizo el reconocimiento a los jóvenes, y por parte de la administración de la UPN, se agradeció y entregó la biblia Caleb a los directivos de la comisaria, quienes resguardaron el servicio voluntario que los jóvenes desarrollaron en favor de la comunidad.

Finalizando luego de 6 horas de viaje, la delegación llegó a la plaza de armas de Cajamarca, donde una comisión de bienvenida los aguardaba; los líderes de nuestra iglesia, manifestaron el aprecio por los jóvenes y por la labor que vienen desempeñando como verdaderos Calebs.

Al día siguiente, luego de la donación de sangre en la plaza de armas de Cajamarca, se tomó el rumbo hacia el pueblo de Porcón Alto, donde los jóvenes Caleb servían a la comunidad y trabajaban en pro de la obra, realizando visitas, estudios bíblicos y oración intercesora, muchos de ellos son Calebs de avanzada, quienes vinieron desde la Misión Nor Oriental, del distrito misionero de Chachapoyas.

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